Cómo ganar dinero rápido sin correr riesgos

Son muchas las situaciones que, por razones de la vida, hacen que una persona se vea con necesidad urgente de conseguir dinero de forma fácil y rápida como, por ejemplo, para pagar una deuda que no deja de crecer.

Poner en alquiler una propiedad, venderla, empeñar un bien o pedir un préstamo son algunas de las opciones para conseguir ese dinero rápidamente, pero hay que tener en cuenta una serie de consejos para tomar la mejor decisión posible y no incrementar el problema, tal y como indica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).

De este modo, quien no tenga suficiente dinero para hacer frente a una deuda o un pago inmediato, tendrá que pedirlo e, independientemente de la cantidad necesaria, las opciones son muchas, pero objetivos solo hay dos:

Pagar lo menos posible por el dinero o no pagar nada: hay opciones gratuitas o con TAE bastante moderadas, inferiores al 6%.

Lograr unas buenas condiciones que permitan estar tranquilo, ya que hay opciones que pueden llevar al riesgo de sobreendeudamiento.

Consejos a la hora de conseguir dinero

Así, como indica la OCU, estos son los 10 consejos a tener en cuenta cuando se tiene que conseguir dinero por medio de un préstamos u otras vías de financiación:

Pide un anticipo a la empresa: las empresas tienen la obligación legal de entregar al empleado que se lo pida la parte del salario correspondiente a los días que lleva trabajados del mes en curso y la parte proporcional de la paga extraordinaria. De hecho, algunas empresas conceden anticipos mayores, sin coste alguno para el empleado.

Pide un préstamo a amigos o familiares: este préstamo es la mejor opción, ya que no genera ningún tipo de interés. Siempre conviene registrarla formalmente mediante un contrato privado y declararla en el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales.

Solicita un préstamo al banco: es posible que ofrezca préstamos con pocas formalidades y, si no es interesante, explora en otros bancos, porque no todos exigen tener la nómina domiciliada.

Tira de la tarjeta adecuada: esto puede ser buena o mala idea según la tarjeta que uses y la fórmula de pago que elijas, ya que las hay que están vinculadas a la cuenta corriente y las hay que no.

Empeña un bien: lo tasarán y entregarán un préstamo de como mucho las tres cuartas partes de su valor, sujeto a unos intereses que no son desmesurados.

Elige dónde compras: si necesitas dinero para hacer una compra es muy importante que elijas un comercio que cumpla dos criterios: darte facilidades de pago y ofrecer un buen precio.

Aplica trucos fiscales: si esta abierta la campaña de renta y tienes derecho a una devolución, presenta la declaración cuanto antes. Y si tienes derecho a algunas de las deducciones familiares que se pueden cobrar, pide cobrarlas mes a mes y aumentarás tu disponibilidad de dinero.

No pidas dinero rápido online: actualmente abundan las entidades que operan online y conceden créditos de importes cada vez más altos sin exigir apenas ningún requisito y tienen TAE desmesuradas, que en algunos casos se acercan al 4.000%.

No uses mal la tarjeta de crédito: son un arma de doble filo, ya que algunas tarjetas permiten pagar compras en un número limitado de plazos sin intereses, lo cual es muy útil, pero casi siempre el pago aplazado supone pagar intereses muy elevados.

No comprometas tu coche: hay empresas que te darán dinero a cambio de lo que a ti te parece que es empeñar el coche mientras sigues usándolo. Sin embargo, esto supone una compraventa con opción a recompra, por un importe inferior a lo que vale el coche, y asumiendo todos los gastos. De este modo, tienes que pagar un "alquiler" y si te retrasas, pierdes el coche.